Ante la nota publicada en el Diario de Madryn sobre lo sucedido en las
Jornadas Latinoamericanas de Equidad de Género y Nuevas Masculinidades
Casa de la Mujer realizó una nota en respuesta a las declaraciones que la misma publica.
Compartimos aquí dicha nota, ya que el diario en cuestión sólo publicó algunos párrafos, y con varios errores.
Puerto Madryn, 6 de junio 2012
Diario de Madryn
Sra. Directora Marisa E. Rauta
De nuestra mayor consideración:
Nos dirigimos a Ud. a fin de expresar nuestra profunda preocupación a partir de la lectura de la nota del día 4 de junio, en páginas 8 y 9 del suplemento Madryn Sociedad con el título “Ningún varón nace golpeador o cliente de prostitución”.
En dicha nota, bajo el título “Expulsaron a hombre denunciado por ser abusador”, nos surgen muchos interrogantes que invitamos a pensar como sociedad.
¿Debe ser repudiable la presencia de varones golpeadores o abusadores, en todo ámbito?
¿Cuándo se supone que como sociedad, o como mujeres víctimas de abusos, debemos olvidar, perdonar? ¿Cuándo se supone que el varón ha cambiado? ¿Cuándo se supone que debemos ser nosotras las inclusivas, las que les abran el espacio para su propia reinserción? ¿Por qué es discriminar el exigir no compartir un espacio público con el abusador?
¿Si no fue hecha la denuncia, que puede hacer una víctima?
La denuncia no garantiza la sanción del agresor, pero es un paso para que la víctima se fortalezca.
Si no se realizó la denuncia, puede prescribir la acción legal, pero nunca inhibir que la víctima pueda expresar su vivencia en cualquier lugar y tiempo, ya que uno de los modos de sanar el psiquismo es con la circulación de la palabra.
Ante la impunidad ¿qué hacer? ¿Qué hacemos?
¿Cuáles son los ámbitos dónde podemos denunciar tan terrible experiencia vivida?
Si lo mantenemos en el ámbito privado estamos contribuyendo a que más situaciones de abuso queden impunes y sobre todo que las víctimas sigan sintiendo que están indefensas.
Si no lo denunciamos públicamente le estamos dando luz verde para que el victimario arremeta contra otras posibles víctimas.
Si lo denunciamos públicamente y sobre todo si la víctima se atreve a hacerlo puede experimentar la sensación de que por primera vez en su vida pudo defenderse. Este acontecimiento es trascendental para la construcción de la autoestima de la víctima. Este tipo de denuncia puede resultar de inspiración para quienes atravesaron por situaciones similares. Hay situaciones donde debemos optar: ¿se está del lado de la víctima? ¿o del lado del victimario? Nuestra determinación es clara. No revictimizamos.
Creemos que callar es exponer a nuestras/os niñas/os al peligro.
Según lo dicho por Raydel Romero en la nota mencionada, “Lo mejor que nos hubiera pasado a todos hubiera sido que él pudiera reflexionar por sí mismo sobre esta temática”. Nos volvemos a preguntar ¿Lo mejor para todos? ¿Lo mejor para quiénes? ¿Quiénes son TODOS? Estamos de acuerdo con los espacios terapéuticos destinados a varones abusadores y golpeadores; pero este espacio no fue ni terapéutico ni de formación. Se trataba de jornadas de sensibilización sobre nuevas masculinidades.
Cita del Diario, “Además, siempre es la sociedad la que los excluye y no es bueno que en un espacio que busca la igualdad y la inclusión, se lo eche”, exclamó Raydel quien agregó: “Sé que esto no es un espacio terapéutico, por eso se charló con él y se le recomendó que asista al espacio generado por parte de la Subsecretaría de Género, que está destinado para las personas violentas trabajen sobre ello”.
¿Es verdad que SIEMPRE LA SOCIEDAD EXCLUYE a los abusadores y golpeadores?
Nuevamente citamos las palabras de Raydel Romero, que según el Diario “asegura que si una persona violenta o agresiva tiene la buena voluntad de acercarse a este tipo de espacios, hay que intentar incluirlos para que logren, después de apropiarse de las herramientas, cambiar su actitud”. ¿Cuánto tiempo deberíamos esperar, como sociedad, para conocer estos cambios cualitativos?
Ante esta afirmación contrarrestamos diciendo que desde las experiencias clínicas y bibliográficas, sólo con la buena voluntad no alcanza, para que realmente se produzca un cambio profundo y duradero.
Los hombres no nacen violentos, no nacen violadores, los hombres nacen IMPUNES en este sistema patriarcal y machista.
CASA DE LAS MUJERES PUERTO MADRYN
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